Por azares de la vida llegaste mi amado.
Cuanto te extraño mi amor.
Marcaste mis labios y te marchaste, por cobardía o simplemente no me querías.
Siento cada día más tu ausencia, me pesa esta tristeza que cargo en los hombros.
Siento que ya me desmoronare y tus brazos no me sostendrán.
Mi corazón lacerado ha quedado,
lo arrastro a la vida para algún día volverte a ver, sentir y escucharte.
Tus ojos como bosques donde solía perderme, tus besos que detenían el tiempo.
Eres un ser benigno cariño.
A través de la buhardilla veo las constelaciones que forman tu rostro,
la gotera de mis ojos ya lleno el cántaro que sostengo entre mis manos.
Me quedaré aquí, sola, pensándote
con mi dolor inconmensurable que tu partida ha dejado robre mi.
- Autor: Nohelia Menjivar ( Offline)
- Publicado: 13 de diciembre de 2018 a las 00:16
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Un placer visitar tu portal y tus bellas letras estimada Nohelia
Saludos de amistad
El Hombre de la Rosa
Muchas gracias, un saludo.
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