Enredado en el suspiro de tu recuerdo,
mi corazón se funde por ardor,
entro y te busco con la mirada,
más allí sólo queda tú olor.
El silencio de tu voz me habla,
resuenas cada día en mi mente.
Hijo, tu cuerpo se va cada noche,
pero el corazón lo dejas latente.
Las rosas, y los jazmines medianeros,
embriagan a la despierta aurora
sin embargo mi delicia es,
la esencia que desprende tu ropa.
El cuarto vacío pregunta por ti
mientras guardo abatido las prendas,
y al tiempo amenazo a sus paredes
para que a su fragancia defiendan.
- Autor: poetalibre ( Offline)
- Publicado: 18 de diciembre de 2018 a las 07:33
- Comentario del autor sobre el poema: Dedicado a mi hijo Fernando.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 92
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Comentarios2
El silencio de tu voz me habla,
mientras guardo abatido las prendas,
Hijo, tu cuerpo se va cada noche,
más allí sólo queda tú olor.
Tristes pero hermosos versos poeta muy lindo.
Con aprecio
JAVIER
Muchas gracias estimado Javier...
Reciba un fuerte abrazo!
Hermosos versos de amor y ausencia para tu amado hijito Fermando .
Saludos cordiales
Muchas gracias estimada compañera de letras...
Un abrazo!!
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