Y finalmente
terminé llorando por tus besos,
por tus ojos,
por tu talle.
Por tus pequeños pezones,
por tu cuello,
tu garganta, por la uña
de tu pie.
Por tus ojeras de luna,
por tu llanto,
tus lunares,
por el sonido de tu voz.
Terminé llorando
por que niegas tantas cosas,
risas, lluvia, musgo,
mariposas, el latido de tu ser.
Por tu largo,
largo pelo, por tus gritos,
por tus sueños, por tus ojos,
por tus celos.
Y esos pechos de luna llena;
por tus caderas,
tus penas,
por tus mentiras de mujer.
© Armando Cano.
- Autor: Armando Cano (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de enero de 2019 a las 01:08
- Categoría: Triste
- Lecturas: 56
Comentarios1
Termina con un poquitín de machismo mi amigo poeta.
Un afectuoso abrazo
Mas bien con un poco de dolor, de nostalgia de esa su forma de ser.
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