Blanca y pálida nieve,
que cae en diciembre,
mi cuerpo recubre,
esta fría y brillante noche,
donde mi único destino,
es del camino perderme.
Se forma una ventisca,
con las lágrimas presentes.
El contraste de tu color,
compensa con la oscuridad,
que reside en mi interior.
Apagadas están las luces,
una brisa impaciente de aire,
que mece los vacíos árboles,
hoy lloran conmigo, gotas de agua,
que en un leve suspiro,
dejaron todo el suelo empapado.
A gritos en mi gran ventana,
resuenan en mi oído, como campanas,
avisando del final de mi destino,
donde guiado por tiernos copos,
camino, con el frío en los hombros,
con el destemple que este clima anunció,
frío en mi alma, calor por la mañana,
frío en la noche, calor en mi alma
Entonces, recúbreme esta noche,
déjame sentir tu rígido cuerpo,
y a cambio te daré mi calor,
el cual me mantiene despierto,
para apreciar la belleza, que crea la nieve.
- Autor: Inmóvil en blanco. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de febrero de 2019 a las 06:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 22
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