Hay días de cielos acechantes,
son fulgores que avivan el alma,
amores que nos roban la calma,
dulces sueños que son anhelantes.
Hay mil noches que derraman luz,
estrellas fugaces que pululan,
amores leales que postulan,
nuestra realidad en un buz.
Hay atardeceres entristecidos,
como fragmentos que nos son nostalgia,
como retazo de viento en fragancia,
son ayeres que no están perdidos.
Hay despertares en nuestra inocencia,
aquellas que sin ser nos dieron gala,
son las dulces huestes que nos regalan,
el pudor de amar y de hacer presencia.
Hay sopor en el dolor sufrido,
como un ungüento bruno de un hado,
nos trunca y nos remite a su lado,
nos taja y nos regala el olvido.
Hay verdad en la forma del decir,
pues en cada sentir de un poeta,
van triunfos y fracasos cual saetas,
y siempre la verdad al escribir.
Andrés Romo
Save Creative 1807277839895
- Autor: Andrés Romo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de febrero de 2019 a las 18:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 31
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.