Un reflejo del mar, la sal oceánica,
te dieron el sabor de las algas, el color del verano,
llenaron tu mirada como gotas de fuego,
haciéndote semejante a olas volcánicas,
a un amanecer de corales dormidos
que la aurora va llenando de lentos besos sumergidos.
El color de tus labios mi bella caribeña,
la forma exacta de tu piel dormida,
tiene el encanto de la naturaleza toda,
que entre altos cocoteros y playas extendidas
se fueron esparciendo, delineando tus formas,
haciéndote profunda como la lejanía,
en el vaivén de tus caderas que se mueven
al ritmo de las olas,
y penetran en el verde de mis ojos de musgo
donde te quedas siempre.
Me pasaré la vida como nauta escondido,
sintiendo que el amor se me viene de golpe,
es que no hay otra forma de contemplarte toda,
entre peces de otoño y figuras de arena.
Yo no quiero otra vida que no sea en tus ojos,
no quiero mas que un beso que recorra tus formas,
como un deseo herido con el color del viento,
que mueva todas mis velas hacia tu isla ardiente,
mujer, místico sueño, todo en ti es hermosura.
Tu cuerpo, sus colinas, tu primavera inquieta,
déjame que te ofrezca esta rosa de sal,
que mis manos se beban el rocío
que desciende sin miedo hasta tu piel segura,
donde quiero perderme sin saber del olvido.
Mi bella del Caribe, el sol se asió en tu pelo,
cuando el crepúsculo desangraba tus mares,
marcaba tu silueta como sombra perfecta.
Creciste entre corales, entre el amor que sueño,
déjame estar contigo,
déjame contar contigo las estrellas fugaces
que caen en los mares de las noches calladas.
Déjeme soñar con tus caderas, con tu piel perfumada,
con tus manos que se abren como firmes palmeras,
y descienden a recoger las flores que te dejó el invierno.
Ahora no me quedan más sueños,
que ser un navegante de tus mares,
no me quedan más palabras que las que quiero hablarte,
con las que quiero acariciar tus sentidos,
mi bella del Caribe,
no me queda más amor que este que te profeso,
no me queda más vida, no tengo más deseos
que terminar mis días entre tus cocoteros.
Mi bella del Caribe, el amor te estremece
y ancla mi recuerdo
en una playa solitaria de besos,
donde busco tu boca para que sea el puerto
donde mueran mis días sumergidos en ti.
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Autor:
Soncafe (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 7 de febrero de 2019 a las 12:31
- Categoría: Amor
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: Yolanda Barry, Aqua Marina, Tamrico, anbel, alicia perez hernandez, María C.
Offline)
Comentarios5
vaya que precioso,un gusto leerte.
Para mi también es una gran gusto y honor saberlo estimada poetisa.
Agradecido de su amable cordialidad.
Saludos
Precioso!, un placer leerle.
Saludos!
Gracias por tu amable comentario querida Nica, Aqua Marina,
Es un gusto y honor tu comentario.
Saludos
¡¡¡Que lindo!!!.un gusto leerte. Un abrazo.
Gracias mi querida Anbel.
El gusto siempre será mio, al saber que mis humildes letras son de vuestro agrado.
Saludos y abrazos
HERMOSOS VERSOS
SIEMPRE ES UN GUSTO PASAR
POR TUS LETRAS.
SALUDOS POETA
Gracias apreciada Poetisa Alicia.
El honor que sus palabras obsequian son recibidas con mucho agrado.
Saludos
Una perla del Caribe que hay que ir en su busca amigo.
Asi es mi querida amiga.
Una preciada perla, de mi tan querida costa caribeña, siempre es un tesoro.
Saludos, guerrera amiga
Por eso es elogiada como tal ,como una BELLA PERLA CARIBEÑA
Un cordial saludo
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