A puerta cerrada
hemos trenzado un habitáculo
con miradas de corcho
se igualan los sonidos
de la ruleta rusa
llanto de uvas saladas
donde fermentan las olas
y vibra la sierva luz
de tu fe deforme
como penumbra astillada
en el ángulo muerto del alma
la única fuga posible
es difundir los espejos
hasta que arda la cara interna del ensueño
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