Conocidos solo de oídas...
Abuelos y Abuela que nunca vi,
fueron neblina siempre amaneciendo,
perdida y diluyéndose con la brisa,
con el viento y el correr del tiempo.
Desconocido eterno fue aquel Abuelo
que se quedó muy lejos
en tierra extraña y distante
Se quedó escondido en el misterio
de los tiempos
y de los silencios obligados
de un amor de cita furtiva,
sin apellido y sin sonrisas…
Con su sombrero de alas anchas
camisa de colores y chaqueta áspera,
fue mi otro Abuelo
con sus pantalones de tela gruesa
y zapatos de tacón medio alto
de color negro…
casi siempre acompañados
con espuelas chispeantes
como arropando
sus propios cuentos de historias
redondas y condimentadas
con palabras e ideas medio locas,
fantásticas…
que no oí de su boca
pero si las escuché en boca de mi padre,
mis tíos y mi madre…
Mis Abuelas fueron dos mujeres tiernas,
simples y transparentes
como las aguas de mi estero
- ese de siempre… ese de niño.
Aquella lejos que nunca vi
porque ya se había ido
cuando yo aparecí por esos lados…
se llevó sus cariños y sacrificios
de parir más de una docena de hijos
con la sola ayuda de su viejo
y propio animal instinto…
Sumando fuerza, voluntad y consejos válidos
para confirmar las buenas esperanzas
de tener más hijos…”los que Dios quisiera”…
Los cariños que no palpé de esa Abuela
porque se fue sin conocerla
lo recibí doblados por mi otra Abuela
que los multiplicó con sus cuentos y relatos
tantas veces pícaros y chispeantes
como la sonrisa limpia
de sus labios rojos de amapolas
y sus ojitos claros como estrellas
de auroras nuevas y simples,
sin misterios…
- siempre amaneciendo
tejiendo calcetines gruesos
para arropar los pies
de sus dos nietas
y zurcir los talones de calcetas
de sus cuatro nietos…
- Autor: Purenino (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 20 de febrero de 2019 a las 12:34
- Comentario del autor sobre el poema: Conocidos solo solo por relatos...
- Categoría: Familia
- Lecturas: 17
- Usuarios favoritos de este poema: JADE FENIX, Yamila Valenzuela
Comentarios1
Que lindo mi querido Luis.
Apapacho!
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.