Recuerdo un día en especial... Nuestro día!

Describir a detalle, usando las palabras correctas y la imaginación nuestros sentimientos y momentos de entrega, me haría ser muy gráfico sobre cómo me sentí y siento al estar junto a ti... Al estar juntos y compartir esos momentos...

Dejaría de ser poesía, lírica, prosa, cuento o fábula, para convertirse en una narración erótica...

En la que no quiero profundizar, pues...

Aún en la imaginación misma, nos pertenecemos! 

Pero... 

Recuerdo un día en especial, uno, en el que nos entregamos totalmente, uno, donde nuestro encuentro fue más que solo físico y sexual, fue, enteramente sentimental y de entrega total en mente, cuerpo y alma...

Recuerdo conversar sobre nosotros, reír, jugar, cuestionar y vislumbrar sobre todo y nada... 

Momento tan íntimo, que en medio de cada palabra y cada gesto, nos fue llevando poco a poco a desear estar en la piel del otro... 

Y así fué...

Pudimos desnudarnos por completo, no sólo dejando de lado nuestras vestiduras y ataduras físicas y emocionales, también desnudando enteramente nuestras almas... Dejándonos abiertos a recibir la esencia de cada uno...

Comtemplamos la belleza de nuestra desnudez, aún sin emitir sonido o palabra alguna... Dibujando con la mirada cara pliegue y milímetro de esa piel desnuda y hermosa a la vista... 

Nos abrazamos, acariciamos, besamos, exploramos y recorrimos sin miedo alguno... Adentrándonos en un vaivén de movimientos que despacio y deseosos, fueron encendiendo aún más la llama de pasión que vive en nosotros...

Sin descansar, sin respirar más de lo necesario, sin perder la noción de nuestras miradas, solo, ahí, entregándonos... Uno a uno... 

Un Te Amo con cada beso... Un Te Extraño con cada abrazo... Un Te Necesito con cada caricia... Un Nos Pertenecemos con cada sonrisa...

Dejando así, correr enteramente nuestras fuerzas y energías hacia un solo punto... Alcanzar nuestro éxtasis de amor y placer compartido...

Espacio de tiempo donde, alcanzado este punto, nos compenetramos tan profundamente, que hoy día, vivimos el uno en el otro...

Lugar en el tiempo donde los sonidos que presiden instantes previos a un estallido de fuerzas incontrolables, se enmudecen y sólo dejan hablar los cuerpos, los besos, abrazos y miradas en ese infinito instante de nunca acabar... 

Recorrimos nuestros cuerpos, conocimos nuestros relieves, deleitamos nuestros paladares con el sabor de la piel de cada uno, disfrutamos del sudor corriendo por nuestro costado y espalda... Apreciamos, grabamos, guardamos y valoramos el invaluable precio de nuestra intimidad... 

Recuerdo ese día, ese, en el que dos almas se hicieron una... Y tendieron una red de caminos en el universo que llevaban a un mismo punto... El uno del otro... 

Recuerdo ese día en especial, en el que, horas nos hicieron falta para dejar de ser minutos en el interminable contar del tiempo... 

Recuerdo ese día en especial... Nuestro día!