Niña tan dulce
cargada de penas,
milenarias penas;
culpable de nada
sólo de ser niña,
una niña tierna.
Llevando en tus brazos
sin carnes ni fuerzas,
aunque no lo sabes,
las culpas ajenas.
Tu cuerpo menudo
hecho para el juego,
ignora que existe
el lino y la seda.
Niña del desierto
de caliente arena.
El signo del hambre
marca tu existencia,
mientras otros niños
en otras fronteras
tienen pan y leche,
juegan en jardines
y van a la escuela.
Me duele mirarte
tan desprotegida,
tan dulce y tan tierna,
cargando en tus hombros
por siglos y siglos
las culpas ajenas.
Culpable de nada
sólo de ser niña,
nacida en el centro
de infausta contienda
de otros que fueron
también, ayer niños,
que hoy se disputan
en nombre de Dios
el odio y la guerra.
Quisiera decirte
montón de inocencia,
espero que entiendas...
tu hambre es mi hambre
tu pena es mi pena.
FIN
8 de noviembre 2001
R. Gruger.
(A una niña de Afganistán)
Comentarios4
Aunque parezca retórico el mensaje no lo es. El hambre es nuestra hambre y la indiferencia es algo que lentamente carcome a todos, hasta que el hambre alcance a todos. Felicidades R. Gruger y gracias por compartirlo.
luis
hey mi hermano (a) ... es demasiado, demasiado sobrio, es bueno en verdad que me gusto, su poema fue el logro de mi día, en verdad que si... lo (a) felicito, yo se que no lo (a) esta felicitando Guillen, Felipe o Molina ....pero son mis más humildes felicitaciones como la forma de expresar que para mi es genial.
niña, eres como el siroco,
viento seco, mis lagrimas absorves
te veo ahi........ por el fondo del mar
Bello tu poema he inspirador
Tienes esa magia en tus palabras que me gusta...
saludos!
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