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Como si terminar una relación fuera caer al fango, cómo si fuera caer al fondo de uno mismo a la soledad,cómo si terminar una relación recordara toda la miseria que se esconde en los rincones de nosotros. Como si terminar una relación fuera morirse y entonces viene la necesidad de levantarse, como si terminar una relación fuera caer muy hondo, como si tocará reinventarse y salir más vivo, y más alegre, y más hermoso. Porque cuando eres mujer, y terminas una relación y estás triste es porque el idiota era el otro, el que no te valoró, el que no te merecía. Como si terminar una relación fuera un lugar para salir más orgullosos, como para mostrar que uno puede estar sola y ser una "berraca". Asi, con dignidad. Como si fuese un fracaso del que tenemos que mostrar que no salimos tan fracasados, ni tan derrotados, como si no debiera darnos pena que todas las expectativas se rompieron, como si disimularamos el hecho de que todo se acaba y que ahora hay que empezar a borrar los rastros de ese pasado que de todas maneras existió: a eliminar las fotos, los números, los pedazos de la vida compartidos. 

Como si ahora hubiese que hacerse enemigo del pasado y confesar la racionalidad de todas nuestras dudas, lo que estaba mal desde el principio, lo que se sospechaba. Como si hubiese que aceptar la profecía autocumplida de que una vez más todo iba salir mal, mientras en otro lugar de nosotros guardabamos la hermosa ilusión de que esta vez fuera diferente. 

Como si ahora hubiese que amar de otro modo y hablar de la libertad, y de los cuentos, y de la autosuperación, y de la autoestima. Como si no te amara como te amo, como si no te extrañara como te extraño.