Tarde

Antoniocas

Tarde que me abrazas ciega
Tarde-madre que sosiegas,
Y en tu transitar de flores y jazmines,
enciendes la flama de mis ilusiones plenas

Tarde que quisiera,
Recibir un brillo de mirada suave
Admirar la paz del ave que en ti vuela
Y disfrutar tu luz que para mí es plena

Tarde-madre que cobijas en tu claro seno
El paisaje inquieto y mudo
De esta vida única
Vida que en ti encuentra, repuesta segura
A nuestros dilemas

Tarde-madre que no rindes
Tu aliento a imponencias
Que luchas y aprovechas
Tu momento radiante de existencia

Tarde-madre cual principio innato de misterios,
Intrínseca antesala de la bruma y la
tiniebla, pasas y alegras,
No impones…
¡Eres aire y grandeza!

  • Autor: Antoniocas (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 3 de julio de 2010 a las 21:01
  • Comentario del autor sobre el poema: Poema nacido de una chispa existencial. Versos que brotaron inesperadamente, aunque siempre he sido un gran admirador de ese maravilloso fenómeno atmosférico llamado "tarde".
  • Categoría: Espiritual
  • Lecturas: 32
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Comentarios +

Comentarios2

  • JUSTO ALDÚ

    La verdad es que las tardes invitan. Una bella elegía a la tarde.

    Saludos,

    JUSTO ALDU

  • huertero

    bravo bravo de pie aplaudan me encantan los poemas existenciales

    Tarde-madre cual principio innato de misterios,
    Intrínseca antesala de la bruma y la
    tiniebla, pasas y alegras,
    No impones…
    ¡Eres aire y grandeza

    hasta el desenlace que siempre es dificil de lograr
    Bravo tu primer poema te felicito



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