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La noche, con sus presagios,
duración intimidante,
los males del alma y cuerpo,
se hacen, gigantes nocturnos,
situación de incertidumbre.
...
Mirar la hora, agrega fuego,
para que amanezca, falta,
después de las cinco, la hice,
como que se encuentra, algo más,
que disminuya ese miedo.
Sentimiento desvalido,
que me llega por la noche,
dualidad de la experiencia, ,
mejor hora, amor contigo,
como que ella nos protege.
Como que nadie puede ver,
será prejuicio aprendido?
Noche, asiento de la muerte,
luz, símbolo de la vida,
disgregación, mente humana.
Movimiento de la tierra,
con su eterno acompañante,
el sol, Dios de los egipcios,
dador de vida y de calor,
amanece la esperanza.
Manto invisible de nubes,
se va pintando de rosa,
hay otra clase de ruidos,
entre ellos, voces humanas,
noche, sonidos distintos.
Imágenes que no se ven,
te escuchas más a ti mismo,
distracciones, disminuyen,
es, cuando sales de viaje,
te ayuda el cordón de plata.
Quizás, por eso es el miedo,
queda el asiento de tu alma,
vuelves a pájaro libre,
se abre, la puerta de la jaula,
vuelas, no sólo de noche.
De donde eres, infinito,
un sentimiento inefable,
así, nos encontraremos,
en el principio sin tiempo.
El poeta del amor. 19-04-19.
Cabo San Lucas, BCS. México.
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Autor:
arturo maldonador (
Offline) -
Publicado:
19 de abril de 2019 a las 14:52
- Comentario del autor sobre el poema: Atavismo de la mente humana, noche para amar, para guarecerse de los espíritus, para prender velas e imitar la luz. Cada ser humano tiene su noche, es parte de su origen, simbolismo del mal en el mundo judeocristiano, en otros caminos espirituales el inicio de un encuentro con la unidad.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas:
39
Offline)
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