He quedado impactado.
¿Cómo es posible después de tanto tiempo,
cuando ya no queda nada,
ni un amigo.
Has regresado, precisamente hoy,
cuando ya nada esperaba
cuando todo lo he perdido.
Fuiste aquella rosa que encontré en el camino.
Increíblemente sola,
donde no había nada, ni nadie,
solo la bella rosa,
y enseguida entendí el mensaje del destino.
¿Qué hacía aquella rosa casi en medio del desierto?
De belleza y fragancia irresistible,
te tomé en mis manos,
disfruté, casi enamorado, de tu belleza,
y te guardé en un libro,
de manera inconsciente,
como tantos recuerdos que luego quedan
en el olvido.
Después pasaron los años,
muchos años,
tantos, que el tiempo lo fue borrando todo,
los amores, la familia, los amigos,
hasta dejarme solo,
(o mejor, hasta quedarme solo)
porque solo se queda el que no cuida su destino.
Y así, en medio de esa soledad terrible,
de manera inconsciente,
hoy he tomado en mis manos un libro,
acaso el único que tengo,
por cosas de la razón o por castigo.
Y entonces,
de manera inconsciente,
abro en cualquier página el libro.
Y ahí, marchita,
todavía increíblemente bella,
como mensaje del destino,
acaso esperando este momento desde décadas,
tengo ante mí aquella misteriosa rosa abandonada,
la misma que un día encontré en el camino.
Frank Calle (25/abril/2019)+-
- Autor: Frank Calle (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de abril de 2019 a las 13:49
- Comentario del autor sobre el poema: Caminamos, caminamos, sin saber ni imaginar dónde encontraremos el amor definitivo.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 24
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