Sss... silencio, que el atanor se puede apagar con los ruidos fuertes del exterior y yo quiero que leas, escuchando el rugido del laboratorio interior; hasta llegar al uno y elevar la conciencia a la perpetuidad eterna, de la esencia divina que todos portamos.
Sí meditas las palabras, y vas más allá del sentimiento, será sencillo escucharlo; aunque si comentas, podrás aportar un poco de tu singularidad, a este singular y humilde espacio, donde los locos escriben y los magos comprenden.
Al anhelo de un deseo, al anhelo de un sueño;
al deseo de una pasión, al deseo de celebración...
llegaste tú.
En la cúspide innata de una etapa, en la cima de un cambio esperado;
siendo oportuna tu aparición dada y llegando al borde del presente apartado...
llegaste tú.
Al arribo de una aventura tardía, en la cual buscará,
el espíritu de la razón y el sentimiento del corazón;
en donde pocas han llegado, en donde sólo una quedará,
para perder el camino, para ir juntos donde no quiere la razón...
estas tú.
Al vacilar de una decisión, al vaciar del actuar,
a la indecisión del destino, a la indecisión del camino...
estas tú.
Y del futuro esperado y la esperanza asustada,
que venga lo que ha de venir, que sea lo que tenga que ser.
Para que en el fin de las causas primeras... pueda estar yo.
- Autor: Alquimista de letras (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de abril de 2019 a las 12:31
- Comentario del autor sobre el poema: La finalidad en la causa primera, es siempre el amor.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 13
- Usuarios favoritos de este poema: Ana Maria Germanas
Comentarios2
Profunda e intensa tu prosa .-
Un placer leerte.-
Un afectuoso saludo.-
El placer es mío, al expresarlo; pero también es un gusto su comentario. Gracias
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