No despertamos nunca del mal sueño,
Se materializó la pesadilla,
Palideció el laurel; quedó sin dueño,
Clavó el rencor su lanza en mi costilla.
Se nos desprometieron las promesas
Como versó Joaquín en las canciones,
Tañieron sus campanas las iglesias
Y me bebí veneno de escorpiones.
Así me saludó la noche un día,
Sin yo prever la daga inusitada;
Se me extinguió la llama que no ardía.
Quedó la gris libreta rayoneada
Y fue, el lunar, testigo en las exequias;
Pensose el sol estrella madrugada.
- N. S.
- Autor: Noel salinas ( Offline)
- Publicado: 8 de mayo de 2019 a las 04:25
- Categoría: Triste
- Lecturas: 55
- Usuarios favoritos de este poema: Tamrico
Comentarios4
me parecio divino me encanto leerlo
Muchas gracias... Un gusto
🤔
¿Qué pasa RIMUZ?
No el.
Tu prima está muy bien construido es un gusto al oído leerlo un poco difícil decir en su sentido Pero después de un par de lecturas ya es más fácil lograrlo.
Veo una canto de tristeza a una separación Qué te ha dejado algo de salado
Si me pareció hermoso
No el.
Tu prima está muy bien construido es un gusto al oído leerlo un poco difícil decir en su sentido Pero después de un par de lecturas ya es más fácil lograrlo.
Veo una canto de tristeza a una separación Qué te ha dejado algo de salado
Si me pareció hermoso
Muchas gracias por tu comentario y muy atinada interpretación. Saludos
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