Cualquier día es adecuado, preciso,
para un recuerdo impertinente, furtivo,
anarquista, frívolo atemporal, inconsciente;
vástago de sinapsis amorales, libertinas.
Visitante imprevisto, colado fugaz, astuto.
Imponente, toma posesión del terruño,
no conoce de linderos, menos aun de prudencia,
y sin vacilación exhuma lo olvidado, lo añorado.
Entonces, “la culpa” ya no es tal, nostalgia.
Tu recuerdo, rastrillada inevitable en el alma.
Basta nombrarte para que el vértigo infantil
del ginguiringongo me devore desde dentro.
Tus ojos, el baile y el salón, los tres.
Soy yo, tu guapo, algo sobre nosotros.
Odisea espacial a las nueve, musa,
no te va a gustar… soy lo prohibido.
- Autor: Opio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de mayo de 2019 a las 15:35
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 29
- Usuarios favoritos de este poema: Ana Maria Germanas, El otro yo, alicia perez hernandez
Comentarios1
Hola Luis, los recuerdos...invaden, indiscriminadamente los hay de todos loscolores....me encanto tu poema...pero discrepo contigo, el atisbo de lo prohibido...suele.seducir....
Uncariñoso saludo
Por supuesto que sí Ana María, y es precisamente el sucumbir a tal seducción es lo que me permite escribir. Un abrazo y gracias por pasar.
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