Una mujer como yo, ilógicamente muerta
en esas zonas donde otros se encuentran liberados.
mutilada y con las heridas de viejas derrotas,
aun de pie, endurecido el corazón y el alma rota.
Tras el muro levantado después de las batallas,
atesorando tu amor en mis propios términos,
amor de equipaje liviano, elevado, soñado.
Verdad que el reflejo de tus ojos ha revelado.
Y en medio de las soledades me encontré en tu abrazo
y en tu fuerte abrazo encontré el merecido descanso
y en el descanso manso fue que hallé un nuevo destino
y en el nuevo destino un amor al que no domino.
A.B.A. 2016 ©
Amalia Beatriz Arzac
Buenos Aires-Argentina
- Autor: Amalia Beatriz Arzac ( Offline)
- Publicado: 5 de junio de 2019 a las 15:54
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Lualpri, Ana Maria Germanas, Yamila Valenzuela, mariapdfoxa, kavanarudén
Comentarios3
Nunca se sabe dónde y cuando le amor nos atrapa.
Hermosos versos poeta.
Con cariño
JSVIER
Gracias Javier por tu comentario. Saludos poéticos
Bellisimo Amalia, e inmensamente conmovedor.-
Un placer leerte.-
Un cariñoso saludo.-
Gracias por leer mis letras y hacer un comentario tan halagador . Abrazo en las letras
Amor profundo.
Cuando se pensaba que no se encontraría se apareció.
Fuertes brazos que sostienen tu ser amante.
Un placer pasearme por tus letras.
Un fuerte brazo de mi parte
Kavi
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