Siento una voz interna.
Es una dicción en el corazón sonora.
De inmaculada pureza.
Bendita sea.
Su renombre me llena
de amor y de virtud proclamada,
y bien que resuéna,
en mi alma del todo maravillada...
Su tonalidad es augusta,
cómo no, brotando de tan regia Señora,
y que me resulta,
de una Paz, de lo más completa...
¡Oh Virgen Santísima!
Rumorosa en mi poesía advenída,
de virtudes adornada.
Enhorabuena por tu grandeza mística.
- Autor: el brujo de letziaga (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de junio de 2019 a las 05:04
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 82
- Usuarios favoritos de este poema: Luna y Poesía
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.