Génesis 2:24. “Por tanto dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán una sola carne.”

♥(¯`*•.¸♥millondurango♥¸.•*´¯)♥

El hombre se enamora de una mujer

y matrimonio le pide.

La bendición de Dios

consigue.

 

Se adherirá a su esposa

sin condiciones egoístas…

amarla

y a sus diferencias respetarla;

unirse en un solo ser,

una  sola carne,

y con amor

las cosas ha de solicitarle.

 

El hombre y la mujer

son hechos el uno para el otro,

y en parte como prueba

exhiben orgullosos una foto,

abrasados

y casados.

 

Son un complemento

de sus gustos y diferencias

que les sirve

para luego contar sus experiencias.

 

Ambos

disfrutan de un nuevo amanecer,

con la meta en mira

de a Dios obedecer.

Juegan todos los días

y las carcajadas alimentan sus alegrías.

 

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        Autor: Millón Durango

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