*
Las hadas mueren
Entre los dedos de los trolls.
Lo que las mata no son sus manos
Sino la inocente sorpresa
De que no pueden cambiarle
Al monstruo su execrable condición.
Descubrir que serán presa y no amos.
Mueren al morirse su aniñada ilusión.
*
Las hadas mueren
Cuando nadie cree en ellas;
Cuando la trampa no es tan seductora,
Cuando su alucinógeno no es tan potente,
Como para encarcelarlos en sus fantasías
Teñidas de bosque encantado
Con esos brillos psicodelicos y excesivos
Con un toque a sobre actuado.
*
Su único enemigo natural
Es el poder de la realidad.
Y las alas de libélula se desintegran
Cuando asumen que nunca existieron
Fuera de sus utopías.
*
Las hadas mueren de realidades
Y respiran por mentiras
Repetidas como mantra
Como oración y cual ruego
Al árbol al mar y al cielo
Encontrar un amor verdadero.
Pero se conforman con uno ingrato
Que les susurre que son reales
Todos sus delirios superficiales
Que las haga sentir volar por un rato.
Solo con tal mezquino gesto
Se entregan en un pacto.
*
A algún troll le llamara la atención
El aleteo notorio de su desesperación
Y éste se volverá el nombre de su desvelo
Y ella hará su cortejo, su irrisorio despliegue
Se sentirá deseosa, encantadora, hasta dominante
Y para el será lo mismo que ver
Un mosquito bailando cuando llueve
Y será tan importante e influyente
Como un microbio posándose en la nieve.
*
Ambos se alimentan de la credulidad
Uno por crueldad y el otro por necesidad.
Y para rematar;
Le ofrecerá un anillo de opaco brillo
(Perteneciente quizá a una niña que devoró)
Ella aceptará y ofrecerá su devoción
En un rapto de infantil emoción
Por fin lo que le dijeron
Era lo mismo que soñaba e inventaba.
Las hadas cuando creen que están casadas
Son domesticables, muy loables como esclavas.
*
El troll será motivado por la venganza
Hacia una bruja que a él no le dio alleganza
Porque sabia leer sus intenciones como un libro
Sabia hasta sus propias e íntimas mentiras,
Conocía perfectamente a su ángel del autoengaño
Conversaban y concluyeron que no era de confianza
Y a las brujas solo la verdad les importa en su balanza.
*
El troll reconociendo que su brutalidad
A la bruja en nada la infería
Envió al hada enamorada a la infantería,
Buscando formas más sutiles de dañar.
La fata fue a puro fervor
Haciendo lo que le exigía su dictador
La strega no mas vieja pero si mas sabia
Tan solo le predijo lo que pasaría
Si con el troll seguía.
Y le sugirió que busque
Su colección de cacería
Un frasco en el rincón último
Donde acumula alas de mil hadas
Como ella todas, usadas y desechadas.
*
Paso a paso, tiempo al tiempo
Todo lo que anuncio la bruja se fue cumpliendo
Mas el hada ensimismada y siempre confundida
Creyó que era obra de una maldición
En vez de notar lo crédulo de su acción
No pudo ver la verdadera cara de su relación
Y apuntó la pena y la ira al lugar incorrecto.
*
El troll tan solo le preguntaba
Si ya había limpiado su pantano
Si ya había matado para darle alimento
Si ya había derrotado a la bruja
La que a su corazón causó tormento.
El hada asintió con todas sus fuerzas
Aunque no fuera real ella quería aparentar
Que cumplió el mandato de modo perfecto
Esperaba un premio por su pleitesia
Alguna recompensa por ser
La esclava numero diez.
*
El corta su animada melodía
La aprieta con una tapa fría
La confisca dentro del frasco
Con una mueca de asco y
Antes le saca el anillo para el siguiente acto
Para el próximo intento.
El solo quiere que quien lo rechazó
Que quien vio su negro interior y lo contó
Se quede sin aliento.
Ese es el fin de sus casamientos.
*
Y la fata se redujo a nada
Como rastro de su cuerpo
Solo quedaron sus alas.
No murió de asfixia ni de hambre
Ni por todas las pestes que traía del pantano
Ni las manos de su amado ejecutaron lo mortuorio;
*
Es que las hadas siempre mueren
Cuando descubren que su amor es un mito.
Cuando ni las fábulas creen en ellas.
*
El ogro seguirá atrayendo hadas dañadas
La bruja cautelosa siempre se estará protegiendo
Y las hadas atrapadas, rematadas
Y por su propia ilusión resucitadas
Seguirán soñando con ser destapadas
Ellas sí creen en su cuento.
*
Y si les muestras la verdad
Una enemiga rencorosa ganarás
Por eso nadie les cuenta a las hadas
Que están muertas y sin lápida
Porque nunca existieron.
Yo no creo en ellas.
*
JULIETA IALLORENZI
PATENTADO EN SADAIC Y DNDA
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
- Autor: JULIETA IALLORENZI (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de junio de 2019 a las 03:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 40
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri
Comentarios1
Julieta
Siempre es para mi un gusto volver a leerte por que te identifico como una joven llena de inquietudes que quieres resolver dejando correr tu imaginación.
Un gusto y gracias
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