Cada trazo de acciones simplificadas en los días que viven perjudiciales,
los que pertenecieron a alegría y hoy se conjugan en arrepentimiento,
se rompen tentados por igual,
todos son fatales,
todos se han hundido en quimeras perdidas,
todos son vanos,
crepusculares notas que han vivido su turno,
miles o millones o incontables,
tantos caídos,
los que llegaron.
La lista de los vencidos,
la desilusión que fue ilusión en alguno de ellos
la ilusión que dejó de ser ilusión, en otro de ellos,
en un trance cambió para mal o para despertar y saberse banal,
haber nosotros glorificados,
rompieron juntos marchitos.
Los días están sepultados en haber desaparecido,
Sus propios muertos se recuerdan en mil memorias dobladas.
El cadáver que pareciera regresar a vivir al menos en uno de ellos,
rasga en lamento.
Jamás nos supimos felices, a pesar de serlo, en cierta ocasión,
no lo sabíamos en alguno de ellos,
lamentando cualquier fortuna o gracia,
eran vanos todos ellos.
Se llaman fotogramas frívolos o escritos fugaces,
temblaron para esfumarse,
Son inmóviles, son entonces riqueza misma (y sin sentido)
son las ilusiones de otrora
son la tentación de antaño.
Son lo que ya no son.
El ser actual (es) ahora desaparece.
Siempre sucumbió, siempre desapareció.
Lo que era y ya no es.
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Autor:
Jesús Oscar Ugalde (
Offline) - Publicado: 27 de junio de 2019 a las 02:30
- Categoría: Triste
- Lecturas: 24
Offline)
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