I
Mujer noble y virtuosa
Eres una joya de incalculable valor
Porque Dios hizo en ti la labor
Más preciosa del planeta
Tu alma es pura y grandiosa
Te dio la destreza maravillosa
De levantarte de las adversidades
Porque tú eres el eslabón sagrado
Que une a la perfección
Lo terrenal con lo divino
Tus cualidades son eternas
Las herramientas perfectas
Para siempre proseguir en el camino
Aquella que detrás de su dureza
Esconde el dolor y la tristeza
De todo lo que en tu vida ha vivido
II
¡Mi oración pura y eficaz¡
Es el complemento perfecto
Para llenar tu vida de grandeza
Porque tú eres la obra maestra
¡De Jehová de los Ejércitos
Por esa y muchas razones
Es hora de extender tu mano
Y pedirte al soberano
Que tome tu mano con la suya
Y no te dejes caer jamás
Porque hoy lo necesitas más que nunca
Dile que deseas la tranquilidad
Que es descansar en su regazo
Porque estar en sus tiernos brazos
Fortalece y purifica tu alma
Dándole completa calma
A tu corazón adolorido
III
¡Cuando la angustia toque de nuevo tu puerta¡
Ábrele y hazla pasar
Pero háblale con autoridad
Porque Jesucristo te dio la potestad
De pelear grandes batallas en su nombre
Porque el nombre sobretodo nombre
Es tu escudo y tu guía
Y si cuentas con su compañía
Toda lo imposible es posible
Y aquello que estuve invisible
Pronto será observado
Para que mundo sepa
Que delante de ti siempre va
El Ángel de Jehová
Dirigiendo tu camino
Porque su manto divino
Te cubrirá ahora mañana y siempre
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
04/07/2.019
05:55 a.m.
¡
- Autor: Poetisa de Jesucristo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 4 de julio de 2019 a las 07:01
- Comentario del autor sobre el poema: ¡Ahora más que nunca¡ Encomiendo a ti mi camino ¡Amado y eterno salvador¡ Tú eres el eslabón sagrado Que une lo terrenal con lo divino Mi pronto auxilio en la tribulación Tu amor es el motor Que impulsa a dar la pelea Para lograr las promesas Que tú para mi has creado
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: Josefina Bravo, Mauro Enrique Lopez Z.
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