Keroseno, es lo que hallo ardiendo en mi pecho
Cuando observo bien y solo veo ese hecho
Ese camino tan tosco, peligroso y tan estrecho
Tanto que no sabes si el camino es saltar, o caminar derecho
Caminos truncados y enredijos
Saltos al vacío y más de mil acertijos
Estando aquí perdido en el medio
De un laberinto tan confuso
Que se pierde cualquier intento de asedio
Con un sentimiento tan difuso
Que te invade la locura sin remedio
Cualquier camino te podría llevar al centro
O llevarte a encontrar tu fin desde adentro
La razón se disipa en esta búsqueda interminable
La zozobra invade cada paso al caminar
La duda imbuye el pecho, al no saber cómo va a terminar
Y no hay forma de retroceder, el final es inevitable
Pero entre tanta maraña y enredo
Solo queda avanzar y confiar en tu credo
Y de tanto deambular volvimos al principio
Sin saber que camino tomar, que suplicio
Todo esfuerzo parece ser en vano
Entre espinas y rocas, avanzar no parece sano
Pero retroceder se ve aún más insano
Tal vez, lo único que falta para llegar a lo que codicio
Tal vez solo sea saltar al precipicio
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