Nunca estuve más solo y acompañado. Un perro tumbado y un gato dormido. Un viaje ignorado hasta aquí vivido. Han conocido pena y alegría pero ninguno derrotado. Es bueno en la última etapa. Gozar de la buena compañía. Vivir la pena y la alegría. Y torear al viento con invisible capa. Dormir en una playa vacía. Caminar por un campo florido. Dormir la siesta después de haber comido. Y todo esto aunque esté vacía la alcancía. Vivimos una época de líderes. Que me producen arcadas. Cuando no fuertes risotadas. Que me revientan los esfínteres.
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 21 de julio de 2019 a las 06:53
- Comentario del autor sobre el poema: Mientras escribo estas líneas escucho flamenco en una emisora, y como este arte es serio y alegre se refleja en estos versos. Saludos para todos
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 14
Comentarios1
Un famoso periodista de los años treinta llamado Cháves Nogales escribió una biografía sobre el más famoso torero de entonces, Juan Belmonte , lo más emocionante es que el torero por la noche acompañado solo por un amigo , toreaba desnudo Belmonte no quería la muchedumbre para algo que él consideraba sagrado, saludos
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