Clorexipido al revés, contra el etanol

Cuando tú yo nos vimos por primera vez,

Yo llevaba la razón de este momento,

Con la idea de que esta vez,

Fuera para siempre nuestro amor.

Que era fuego, como  el etanol, que se deshace,

No con agua, para tapar el humo, con la fórmula.

Que robaron esos médicos de ese científico que conocemos.

Cloerhexipido, tantos, van detrás que se cree que no sean médicos.

Si no, médico “secreto”.

Pero la verdadera fórmula está en la piscina que nos metemos,

Tras un meneo, como hacen todos, en Valladolid.

Porque para hallar, hay que vivir. No estar en casa, y no tener ataduras, a un secano.

Como un tucán, desplumado, me fui quedando.

Sin tú amor, sin tú presencia, porque los meneos se olvidan pronto.

Pero el dinero que da la fórmula invertida, que sólo la sé yo.

Y los demás la copian, porque se van a acostar a las consultas-médicas, pero realmente.

¿Quiénes son, esos locos?.

Si no han vivido, debajo del agua, haciendo largo, largo, siendo amigos.

Como tú y yo. Que nos metimos debajo del mar, dando con la estrella azul.

Y un corazón, que abrimos.

Leyendo: “ la verdadera fórmula para curar el acné, es vivir”.

Con una receta, de banana-coco y fórmula invertida de agua, que nadie sabe.

Sólo yo, una nadie, que quieren que se muera, porque ¿Quiénes son?

¿Son médicos, o son espías secretos?.