Mientras la brisa nocturna me acompaña, un frío toca mi cuerpo cual presencia fantasmal
mi corazón inquietante arrancármelo del pecho quiero, y sin mover mis labios que mi mente le
reclame tanta rebeldía, tanta recurrencia
o será juzgado a cadena de olvido
En su insensatez atrajo nubes negras que cubrieron a dos hermosos luceros dedicados a iluminar senderos
y cantidades de gotas amargas cayeron por los suelos
Culpable o no, que tenga un juicio justo.
P.P
- Autor: Pastor Perozo ( Offline)
- Publicado: 9 de agosto de 2019 a las 10:42
- Categoría: Amor
- Lecturas: 22
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