MI TAITA NAZARENO

Eugenio Sánchez

 

Nazareno, taita y guía de mi pueblo,

consuelo de mis aciagos días

y de las noches inciertas  de mi infancia.

Como añoro tiempos aquellos,

tiempos que solo vuelven con el recuerdo.

Me parece que fue ayer,

 me parece estar  oyendo que:

 la banda de músicos toca el “Alabado”,

mientras  juego descalzo en la placita

buscando monedas y restos de cohetes.   

Observo tímidamente tu  angelical rostro

y  disfruto el perfume de cirios y de  incienso.  

Mientras que  a tus pies, dos angelitos juegan,

se  esconden bajo tu manto y sonríen.

El Padre  Carranza canta en latín.

Justino, con su lánguida figura y doliente mirada,

arrodillado agita una campanita.

Anunciando  al Espíritu Santo. 

Los hacendados,  sentados  en primera fila.

más atrás,  el albero y el  mayordomo.

Ancianas cubiertas la cabeza con finos  tules.

Las ruedas de cohetes a media misa

explotan, rompiendo los  tímpanos,

solo Justino, indiferente a todo estruendo.

Lloran los niños en la pila bautismal,

los padrinos arrojan el capillo,

a empellones  disputábamos, los caramelos

y los usquilanos vendiendo  turrones,  chirimoyas,

ollas de barro y harneros de calamina.

La banda Libres de Julcán, en la esquina de la plaza.

Pablo Lizárraga, al frente con su sonora trompeta.

haciendo retumbar los peñascos.

Los fugaces  cohetes surcan el  cielo azúl.

Los hacendados y sus invitados bailan en su patio dorado,

en la plaza los borrachitos saltan con  botella en mano.

Las chinas palanganas estrenan prendas nuevas:

chompas  de vistosos colores,

sombreros de palma y zapatos de hule.

En la procesión tú vas  sonriente,

el viento juguetea con tus rizados  cabellos.

En medio de cánticos y rezos

va cayendo  una lluvia de pétalos.

Después de contemplar tus campos, tu río,

tus laderas, tus caminos polvorientos

y  repartir tus ricas bendiciones

vuelves a tu trono  ¡Oh!  Taita  Nazareno.

De pronto surge una voz temblorosa por la emoción:

 “Allí te quedas Nazarenito, hasta el otro año”;

 besa la túnica, y  se anublan sus pupilas,

y unas lágrimas ruedan por sus mejillas. 

 

 

 

 

Eugenio Sánchez Bacillio

 

 

  • Autor: Jesbac (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 14 de julio de 2010 a las 00:58
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 463
  • Usuarios favoritos de este poema: la negra rodriguez
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Comentarios +

Comentarios11

  • REYNA GALACTICA

    Folklorico escrito, remenbranzas del terruño! lleno de calidez. Gracias por compartirlo.

  • Libra *M*


    También donde vivo se celebran esas procesiones, esas manifestaciones de fé.

    Muy sentido tu poema amigo.

    Petonets,

    Libra *M*

  • JUSTO ALDÚ

    Las procesiones en honor al Nazareno se celebran en muchos lugares de latinoamerica. La que describe tu poema es típica de estos lares. En Portobello, Panamá cada 21 de octubre se realiza la procesión del Nazareno
    o Cristo de los Milagros. Es muy regionalista, tal como tu lo narras en tu poema. Tenemos muchas cosas en común.

    Saludos,


    JUSTO ALDU

  • Aly Michó

    Que bellamente has decrito esa fiesta religiosa. Me pareció estar en medio de ella.
    Muy bellas letras y que tu Nazarenito, te proteja siempre a ti y a los tuyos.
    Un abrazo
    Aly Michó

  • Violeta

    EL POEMA YA LO HABIA LEIDO..LA FOTO MUNDIAL...QUE BUENO..PERFECTO..TE FELICITO ..BESITOS

  • florsilvestre

    Bello poema religioso de costumbres dee tu pueblo
    muy bien plasmado
    un abrazo

  • claudiale1819

    Esta muy bonito mi amix...saludos.

  • Ligia Lo. Unicornio

    Jes, un relato muy claro de esas costumbres y tradiciones que enaltecen a todo un pueblo.

    bonito relato.

  • salgomanzano

    Eugnio,delicdos verso,muy locales,describiendo tu sentir sobre tu procesión que tanto sientes en tu alma
    Un abrazo desde la Alhambra (Granada) Salvador

  • Diluz

    He leído con mucho respeto e interés tu poesía tan bellamente descriptiva de cómo se vive y se siente una procesión, aquí en Buenos Aires todos los años voy con mi hermana a la ciudad de San Nicolás donde se realiza la procesión de la Virgen del Rosario, y me ha recordado mucho todo lo que tu cuentas
    Me gusta sentir esa fe pues es el pan espiritual que nos alimenta sin engordarnos ya que no solo de pan vive el hombre porque las personas necesitamos varias cosas diferentes para poder ser felices.

    Te dejo mi cariño
    Diluz

  • claudio ramirez vasquez

    "!Oh¡ Taita Nazareno,
    Alli te quedas Nazarenito,
    Hasta el otro otoño".

    Con la sensibilidad de Tu alma nos entregas la cultura de tu religiosidad en una proceciòn en donde todos los actores(as)
    vistoamente adornados, escuchando a Pablo Lizarraga, entonando cànticos...que transmiten esa sinergia de tradiciònes para compartirlo desde mi rebelde-verde Antequera.

    Claudio



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