-Amor adolescente-

Prosa Osada

Ésta es la segunda vez que me ataca la risa al verme en un par de adolescentes, ella le preguntaba: "¿Qué piensas de mí?" y él le respondía titubeante y tembloroso; secándose las manos en los pantalones: " Pienso muchas cosas, eres muy bonita". Ella claramente no se veía satisfecha así que pregunto otra vez como dándole una segunda oportunidad de decirle lo que ella quería escuchar (Algo que le hiciera creer que ella es maravillosa), él se acercó un poco a su oído y hablaron en secreto por un rato más hasta que se relajó el chico y se acomodó nuevamente en la silla del café y ella acomodó su cabello corto detrás de su oreja con su mano derecha, levanto la mirada, acercó el sorbete a sus labios y le dio un trago a su café frío.

Yo había hecho esa pregunta en varias ocasiones tal vez en el pasado, y creo recordar a quién le pregunte y vagamente cuál fue la respuesta; Pero de lo que estoy segura es de que nunca me fue suficiente, hasta que encontré al amor más infantil de todos mis amores y que en cambio me lleno el alma con la ilusión que corre como una llamarada por las venas de una quinceañera. Y escribí entonces mis mejores versos y dibujé lo que nunca había hecho en mi vida y me sorprendí yo misma de la magia que me convertía en artista talentosa, y me devolvía la juventud y la ternura a una mujer que sabía que no duraría mucho tiempo, y que cuando todo terminara la magia también desaparecería, y todo lo demás se iría con el.

Y así fue, nunca más escribí un verso igual, nunca dibujé una sola flor sobre papel, no he vuelto a ser la mujer aquella que se convertía en todo lo que deseara si tenía cerca la magia del joven de aquel ayer.

Ésos dos adolecentes me recordaron tanto a mí primer beso, a estár en medio del crudo y frío viento de diciembre; mes en que nacio mi primer abrazo, mi primer caminata, mi primera conversación sin trabarme buscando las palabras correctas, a ésos  días en que yo era más yo misma y luchaba incansablemente por hacer rendir el tiempo, el amor...

No tenía miedo de que fuera a dejarme aquel joven caballero, yo estaba tan segura de que no habia nadie más igual a mi, que le abría puerta para darle la oportunidad de  comparar los detalles y los esfuerzos, mis manos sobre su lienzo, mis palabras y el fuerte que yo cuidaba para el. No tuve miedo nunca, me daba miedo perder lo que al final perdí y que yo sabía que era inevitable.

Desde aquellos ayeres, nada fue igual, pero en ésos adolecentes me vi, y sonreí, con la nostalgia de haber vivido mis mejores años en brazos de aquel amor adolescente siendo yo una mujer que nunca se dejó mentir, pero que no dejo de creer que llegaría ése amor que por siempre me haría recordar que la magia existe y que sigo siendo tan maravillosa como aquellos días

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  • Autor: Edith Azul (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 19 de agosto de 2019 a las 23:17
  • Categoría: Amor
  • Lecturas: 28
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