Te has marchado gatita,
y te fuiste por siempre,
a un lugar ignorado
con desiertos y nieve,
y te fuiste, de pronto,
al albur y a tu suerte,
sin dejar un saludo
y el adiós tan alegre,
yo recuerdo el maullido,
y aquel tono impaciente,
anunciando paseos
de manera muy breve,
y te ibas tranquila
por praderas y verdes,
a cercanos caminos
y a los ríos y puentes...
Te has dormido gatita
de manera inocente,
sin saber que este sueño
te causaba la muerte,
y ese golpe violento
te ha llevado a las redes,
de la Parca sombría
que segaba tu suerte,
y lloré por tu marcha,
por herirme sin fiebre,
y clavar en mi pecho
un cruel estilete,
y es que fuiste el suspiro,
una brisa y nordeste,
la inocencia en tu imagen
de "negrita" impaciente...
"...Te nos fuiste, gatita,
sin adioses ni preces,
y hay un hueco en el alma
y un vacío en mis sienes..."
Rafael Sánchez Ortega ©
31/08/19
- Autor: Pyck05 ( Offline)
- Publicado: 11 de septiembre de 2019 a las 05:40
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 22
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Comentarios1
PRECIOSOS VERSOS
SIEMPRE ES UN PLACER PASAR
POR TUS LETRAS.
SALUDOS
Gracias Alicia.
Un saludo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.