Yo sé de una mujer. Tú no sabes nada. Que libre quiso ser. Ella no sabe nada. Del amor liberarse. No podemos ser libres. Sin amor y con amor. Libres y presos a la vez. Ando sin ti, tengo el corazón abierto. Tengo las manos abiertas. Y a veces canto solo. Sin darme cuenta. Es que mira creo que aún estás ahí. Nada no tienes remedio. Tu vestido entre tanto gris, amarillos. y anaranjados, entre el ropaje gris y recio. lana tierna con el calor de tu cuerpo
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 20 de septiembre de 2019 a las 06:08
- Comentario del autor sobre el poema: El milagro de la poesía es que puedes regresar a un tiempo ido para nada muerto, por eso no nos cansamos de escuchar la primera melodía. Saludos a todos
- Categoría: Amor
- Lecturas: 20
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