EL OLVIDO Y EL AMOR

EL OLVIDO Y EL AMOR

Se olvidó la cosecha,
se olvidaron las manos,
que arañaban la tierra.
No recuerda la siembra
ni la simiente nueva
y el dolor agostado,
en el vientre se queda.

Superando la forma
se defiende la idea,
obsoleta si medra,
transparente si llega
y gimiendo en la mente,
los residuos que quedan.
Adminículos flacos,
que se adhieren a ella.

Brota el amor del sentido
y el sentimiento incrementa
su poder sin previo aviso.
Va naciendo como el Sol,
entre las nieblas cautivo.
Solloza y ríe sin rumbo
adaptándose al camino.
Como los ojos, se cierra,
cuando planea el olvido.

Sembró la cizaña el necio
en su aparatoso limbo
y traicionando a la mente,
sucumbió en su sacrifico.
Despertares caprichosos
cuajados de amor sin brillo,
como opacas realidades,
ocultas en su escondrijo.

Ojos cansados de ver
sin poder ver lo sencillo,
en la tramoya sujetos
como títeres sin hilo.
El telón que se descubre
los huesos deja ateridos
y la mirada se hunde,
en el núcleo del sentido.
Se van zurciendo los ojos
con los lujosos vestidos.

Se ha olvidado lo que brilla
que en mate torna sin prisa.
Su nombre ya no recuerda,
ni el lugar donde hizo su nido.
Las palabras se perdieron,
pero su impronta dejaron
grabadas con un cuchillo.
Tumefactas en la mente,
gritando, pero sin grito.

El amor se apoderó
de la mente y de la idea.
Dinamitó los cimientos,
de la sólida materia.
A.L.
http://alupego.blogspot.es
24/09/2019