Hola soledad, mi fiel compañera,
Los días pasan y tú, inalterable,
No te apartas de mi.
Cuando alguien se acerca,
sale espantada como impulsada por un resorte,
destino inclemente que de todo amor me aleja,
sinsabores y tristezas, mi vida colman,
¿Hasta cuando he de resistir tan letal agonía?
¿Hasta cuando puede un ser soportar tanta tristeza,
sin caer yerto como un fardo?
Fatal el final de mis días, fatal la esperanza de la vida.
Solo desengaño y desamor han colmado mi alma.
No hay consuelo para mi corazón golpeado por la impiedad.
He de dejar pasar todo aquello que a la larga me dañe,
Y he de vivir, con mi siempre amiga, soledad.
Julio 16/2010
- Autor: Silvestre Sendero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de julio de 2010 a las 22:28
- Comentario del autor sobre el poema: m
- Categoría: Triste
- Lecturas: 73
Comentarios1
Estimado Silvestre, tu reflexión es buena y bien plasmada. Hay que tener fe que cada uno tiene su media naranja. La tuya llegará cuando menos lo esperes. Y más con ese inmenso corazón que deja entrever tus letras.
Saludos,
JUSTO ALDU
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