El chico de la gorra

Micro-historia.

La primera impresión que tuve a cerca de él fue: "Ese tipo de buso rojo con gorra es tan presumido, arrogante y asocial". Fue todo. No pensé verlo nunca más.
Hasta que en una ocasión, por cosas de la u, tuve que pedir ayuda para un trabajo. Un amigo muy amablemente me remitió a él para que lo hiciera (sin yo saber que era el chico de aquella vez), pero el muy grosero se negó a ayudarme. Esto último me lo confesó hace poco.
Luego, por cosas de la vida -o de Dios más bien- empezamos a conocernos, puesto que de una u otra manera, teníamos grupos sociales en común.
Tras el pasar de los años, debido a que compartiamos cada vez más tiempo, espacios y personas, nos volvimos más cercanos. Ya nos preocupabamos por el bienestar de la otra persona.

Y así, día tras día, fui descubriendo la maravillosa persona que había debajo de esa gorra y en lo importante que se había convertido para mí verlo, hablar y estar así fuera sólo minutos junto a él. Aunque aveces fuera distante y eso me confundía.

Y sin darme cuenta, hoy por hoy, es de mis personas favoritas, no solo para reirme a carcajadas, si no tambien para hablarle de como me siento, abrazarlo, contarle mis malos chiste -que no son tan malos para mi gusto pero según el sí-, consentirlo y miles de cosas más.

A veces, es como si la vida se detuviera cuando estoy con él, otras en cambio, es como si el tiempo pasara demasiado rápido y se hace pronta la hora de despedirnos.

En el cabello negro, las abundantes cejas y en las largas pestañas del chico de la gorra, siento que me pierdo; pero cuando bajo un poco más veo sus grandes y bonitos ojitos, veo un espejo en que puedo ver el reflejo de lo feliz. 

No quiero desaprovechar cada oportunidad que tenga para decir y hacerle ver lo mucho que lo quiero y cómo el corazón se me alegra con su compañía.

Al chico de la gorra le debo muchos arcoiris luego de mis tormentas.

Este chico, el de la gorra, quiero que sea para siempre MI CHICO, lleve o no su gorra puesta.

-NJ🌙