Un aire gélido
golpeó mi rostro,
invadió mi cuerpo
atravesó mi carne.
Caló mis huesos,
congeló mi alma,
obnubiló mi mente
despertó mi sueño
invernó mi hambre.
Y una luz blanca
mostró su imagen,
quiso acompañarme
se quedó un momento
calentó mi alma,
absorbió mi pena,
pudo rescatarme.
Me tomó alegre,
me llevó desnudo.
Partí en silencio
como vine al mundo,
solo, abandonado
bajo las estrellas
en un mes de julio,
en paz con la tierra
dejando a resguardo
mi cuerpo cansado
de esperar en vano.
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Autor:
Mr Ed (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 18 de julio de 2010 a las 20:19
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 52
Offline)
Comentarios4
Muy bueno tu poema, interesante. Te felicito.
Gracias por tus palabras Liliana y por haberme leido.
si, me gusto, te felicito, buen poema, es cierto pobres personas que asi como dios las trajo al mundo, asi regresan, solitarios y sin nadie que les tienda una mano.
Gracias amigo Panameño por tu comentario.
Saludos
HERMOSO...VERDADERAMENTE BELLO.
TE ABRAZO.
Gracias amigo Florentino por sus palabras. Un
honor que le haya gustado.
un abrazo
valla, exelente tema, exelente tu poema
esos nuestros hermanos que por una u otra razon que no podemos juzgar estan hay
un guto leer tu poema
Gracias Luis por haber leido y comentado. Me alegro
que te haya gustado.
saludos
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