Doblemente.

Quise verte como
yo te veo
me copié de mí
fije tres coordenadas
entre levante
y poniente
para no perderme
y fui soltando
poco a poco
las amarras
que me atan
a mis pies
luego subí
a lo alto de mis
pensamientos
y allí te vi por fin
descalza
sin maquillaje
junto a un montón
de imágenes
cargadas de palabras
y horas florecidas
de insomnios
te vi a ti
y a mí a tu lado
tus hombros desnudos
apoyando mi cabeza
mis manos
obreras incansadas
abriendo espacio
en tu cabello
que diluía mis huellas
para reconstruirlas
supe lo que sabía
volviendo a descubrirlo
y fui dichoso por mí
y también por mí
doblemente hallado
y encontrado
doblemente crecido
y levantado
desde tu puerta
hasta las esquinas
de mi más
perspicaz anhelo

Eduardo A Bello Martínez
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