Nos encontramos
con un hombre llamado Todd,
nuevo en la ciudad
junto a su esposa embarazada.
Quiero publicar un libro,
venderé impresiones,
es fácil burlarse de un adulto –susurró.
Me conmovió
que intentara cambiar el mundo,
viviendo en la calle,
pero no quise su historia.
Le fotografié una vez
-llamo la atención
por si encuentra
noticia en la red-
El hombre sacó
una cuchilla de afeitar barata
-una simple cuchilla de afeitar
podía transformar todo-
Afortunadamente.
poema de La costurera de Malasaña, 2012
- Autor: Margarita García Alonso ( Offline)
- Publicado: 6 de noviembre de 2019 a las 10:33
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 14
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