I
Una vez te pido señor
¡Ayúdame a entender¡
Que no todo es lo que parece
Que todo sucede por una razón
Y solo tú con tus designios
Pones en total equilibrio
La situación más hostil
Transformando en vaso virtuoso
El corazón endurecido
Porque tu amor inmutable
Es el sentimiento inigualable
Que marca la diferencia
En un mundo de indolencia
De falsedad y de traición
Donde tú eres el eslabón
Que une lo terrenal con lo divino
Porque tú eres poderoso
II
¡Mi oración tiene un matiz de dolor¡
Al sentir a mi alrededor
La maldad de mis semejantes
Aquel que sin motivo aparente
Me desea lo peor
Sin contar que el señor
Es quien cuida mi existencia
Él es mi escudo y mi guía
Y bajo su cobijo
Estaré por siempre segura
Porque su cobertura
Estará conmigo siempre
Para nutrirme con la llenura
Que solo da el Santo Espíritu
El único que seca mi llanto
Y restaura mi alma del dolor
Con su amor incondicional
III
¡Gracias te doy mi señor¡
Por librarme del seol
Gracias por quitar de mi camino
Aquello que no me conviene
El obstáculo que impide
Que tus bendiciones lleguen a mí
Porque tú eres el dador
De todas mis habilidades
De poderosa guerrera
Eres el mayor tesoro
Que guardo en mi corazón
Eres la luz maravillosa
Que con su majestad grandiosa
Me invita a proseguir
Al tener como certeza
Que Jehová es mi fortaleza
¡Ahora, mañana y siempre¡
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
13/11/2.019
01:18 a.m
- Autor: Poetisa de Jesucristo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de noviembre de 2019 a las 02:18
- Comentario del autor sobre el poema: Padre mío A ti te pido Que cuides mi caminar Para jamás tropezar Dos veces con la misma piedra Quiero avanzar en el camino Sin dejar que la maldad Con su flagelo atroz Cercene de un tajón El amor que alma enriquece
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: Josefina Bravo, alicia perez hernandez, neosan, Yamila Valenzuela
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