Bajo el sol amigo
de un Abril aún tibio,
me inserté en un mundo
de infinita paz,
proclive a recuerdos
dormito de a ratos,
y vuelo directo
allí...donde estás.
Me imagino un reino
pues eres princesa,
y aunque muy lejana
te siento en mi,
recurro al milagro
de pedir deseos,
pero pienso triste
que ya...te perdí.
Mis días son cortos
y las noches largas,
el sueño no viene
pensando tal vez,
que al cerrar los ojos
pasas por mi lado,
y estando dormido
no te puedo...ver.
Mi amiga la luna
que me da consejos,
le pregunto siempre
que debo yo hacer,
ella con sapiencia
y ternura infinita,
me dice, poeta
a veces duele...querer.
Probé de insertarme
en otros amores,
pero es inútil
nada es igual,
a veces decido
por siempre olvidarte,
y otras me muero
por verte...llegar.
Esto que les cuento
ya es un calvario,
busco un alma buena
que se quiera apiadar,
y me diga entonces
si este amor intenso,
existió de veras
o no existió...jamás.
Boris Gold
(simplemente…un poeta)
- Autor: boris gold ( Offline)
- Publicado: 20 de noviembre de 2019 a las 09:13
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: Yamila Valenzuela, David Arthur
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.