Certeza y Confusión

Felix Gabet

Me olvidé de quererte

Lo veo a él y mi razón se resiente

Es como sentirte celoso de los rayos del sol que tocan la luna

Sabiendo que esta no te va a dar oportunidad ninguna.

 

Qué triste corazón solloza

Se detiene sólo con el humo del cigarro y una prosa

Con algarabías y tempestades

Que distraen al estúpido en necedades

 

Que no deja de pensar en mente

Pero distraen bien al agente

Distraen a la locura con cordura

Y evitan esas amargas ternuras

 

No seas impetuoso grita una voz de melón

Esa voz escuchada en otra ocasión

Que gritaba al agente constantemente

No te enamores que es malo para la mente

 

Querer queriendo ser querido

Y amar añorando ser amado

Qué reacción más absurda

Que al agente estos dilemas lo aturdan

 

El agente no encuentra certeza en sus suposiciones

Pero encuentra evidencias inefables

Que hacen que mate a otras cuestiones

Y que huya de las tempestades

 

Cobarde agente no se para en lucha

Sino corre cuando apenas escucha

Al hombre tiernas palabras salir de boca

A la doncella que ni siquiera lo aboca

 

Pues asumo que el agente llegó tarde

Y aun así, se enamora de la doncella

Él siempre persiste cuando arde

Y ahora un hechizo lo aferra a ella

 

El agente anteriormente en su desesperación cometió un homicidio

Fue al orgullo que le provocó algún fastidio

A pesar de ser parte de su círculo cercano

Mato a su amigo, con piedad, el puritano

 

El agente en su defensa avocó a una instigación

Comprende que ella lo indujo a esta situación

No le sale la jugada en realidad

Pues se demostró del agente su gran voluntad

 

El agente además es acusado de bigamia, hurto y acoso

Y para peor, esta denuncia por homicidio piadoso

El agente estará preso por largos años

Solo el derecho de gracia lo salvaría al huraño

 

Los pasos ofuscantes avanzaron sin piedad

Los magistrados y testigos en sus posiciones

Están preparados en la búsqueda de la verdad

Y no admitirán contradicciones

 

¡Bigamia! agente del delito

Usted enamora ignorando otros escritos

¡Hurto! señor reincidente

En grado de tentativa, acusó la mente

 

¡Acoso! Individuo delincuencial

Sofoca a otros seres en su campo vial

Y ¡Homicidio! Ser inescrupuloso

Explicará usted el móvil tan dichoso

 

El viento no dio un soplo más

Solo se escuchó un latido de paz

Y una melodía deliciosa

Juro no habrá melodía más grandiosa

 

Se quietó el espacio y sonido

Había solo un leve soplido

Como el canto de un gorrión

Que levemente se escuchó

 

Culpable, de bigamia porque amé sin restricciones

Pero a mi madre le tengo mayores consideraciones

Culpable, de tentativa de Hurto porque intenté robarle tiempo

En risas, sonrisas y buenos momentos por ejemplo

 

Culpable de Acoso por hacer evidente mi preocupación

Y darle palabras de aliento y ternura en toda ocasión

Y de Homicidio Piadoso no se olviden por supuesto

Por ayudar al tenue orgullo debilitado y gritando al viento

 

Este último fue su amigo y lo mató sin ningún reparo

Con un cierto desagrado por hacerlo desconfiado

Pero también por piedad a este amigo fuerte

Que suplicó a gritos que le dieran muerte

 

Muerto este, el agente cometió los demás ilícitos

Sin entender ni siquiera su estado síquico

Algo le quitó la percepción de la realidad

Sobrellevando este una débil ansiedad

 

Simplemente era una sustancia psicotrópica

Amor, se dice en la concepción filantrópica

Pues el agente, al amor incluso, termino siendo adicto

Por ello, quedará absuelto por interdicto

 

El agente comprendió lo que le llevó a este panorama

Pecado pues, enamorarse de esa tan bella dama

El agente caerá y caerá en otra ocasión

Es terco y vanidoso, y se llama corazón

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