Isabella

Como el pajarillo del invierno por la lluvia caer

eleva su voz y se hace escuchar,

Asi mi corazón enajenado

no te deja de pensar,

Fuiste pensada tal y como eres

gorda, blanca, pura y amada,

¡De mis entrañas aunque soy varón fuiste formada!

De las horas que se hace días y de los días

que se hacen meses,

Al viento escucho suspirar

que tus ojos y los míos se vuelvan a encontrar,

Mas el destino cruel, cual ladrón

maligno y sin piedad,

¡Del Amor de mis anhelos me hizo alejar!

Hoy la luna gris a mis pasos bajo tu balcón

me son testigo fiel,

Que en la noche de la soledad por tus besos

me ven adolecer,

Atardecer que acaricia el alma

Evocando un ayer

¡Que Dios me de vida para verte crecer!                                                   

Campanilla bella,

Tanto te pensé,

Tanto de deseé,

Tanto te esperé,

Que ahora que estas en este mundo terreno

¡Ya no te puedo ver!

Y cuando seas grande y una feliz mujer

pregúntale a la luna mi testigo fiel,

pregúntale si algún día este hombre

te ha dejado de querer,

Y si te responde entonces comprenderás

cuando en la vida te he amado

¡Aun mucho antes de tu nacer!

Como el barco iza velas

hacia el azul e infinito mar

Dios tenia en sus planes que ISABELLA mi hija

¡Te debías de llamar!