El tiempo pasa lento y la noche se obstina en nombrarte cada vez que el viento ulula
intentando llevarse las ultimas cenizas de tu recuerdo. Imposible olvidarte cuando al llegar el estío apareces disfrazado de melancolía. Amanece, me maquilla la dicha, más en lo recóndito de mi alma la pena se acomoda simulando que nada pasa.
Gime filántropo el silencio haciendo eco en la llanura del olvido. Despertando al pensamiento que se abre generoso preñando de añoranza el día. Sin lograr siquiera postergar aquel mágico momento, en que un juramento coronó la dicha de aquel tiempo en que la luna sólo brillo para nosotros. A la vez que el hastío estranguló al más bello y puro sentimiento. ¿En qué momento se nos fue de las manos la alegría? Cuando eufórica cantaba victoriosa ávida de tus caricias y tus besos. Hoy la promesa libera el último sollozo demandando atribulada tu presencia.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen tomada de Google.
- Autor: Poetaymusadelared (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de diciembre de 2019 a las 04:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: anbel, Yamila Valenzuela, Freddy Kalvo, Mauro Enrique Lopez Z., alicia perez hernandez, Lidia, Lualpri, migreriana, Alex R. Palacios
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