Así fué que todo murió

No fue mi culpa

Poco a poco aparecieron las inseguridades
En ocaciones la soledad me invadía
Me apresaban mis propios temores
Temores que a la vez eran tuyos
Y que no fuiste capáz de cargarlos solo
Aún sabiendo
Que yo,no tenía la culpa
Pero eras tú quien disfrazó la culpa
Y se encargó de hacerme creer que toda la culpa era mía.

Eras tú quien me lastimaba día a día.
A pesar de no estár presente.
No fuiste suquiera capáz de ayudarme a salir del caos que lentamente me consumía.

Solo necesitaba que estés presente
Quizá ahora a pesar del tiempo transcurrido
Y el dolor causado, te necesito
Pero, quien podrá remediar todo el malestar que causaste.

Las heridas no han sanado.
Simplemente las he escondido
Ahora están en lo más profundo de mi ser.
Todo aquello que creí olvidado
Vuelve a mi cada que me refugio para sentirme protegida.

Todo ha vuelto y me lastima y se convierte en espinas.
Mi alma está llena de llagas que me hieren el pecho.

Cuando me liberaré
Talvez no lo logre
Quizá encuentre consuelo en ese ser llama Dios del que tanto hablan,y que por momentos me devuelve la paz.

Pero nadie será capáz de hacerme olvidar.
Cada lágrima derramada.
Es un futuro incierto quien tiene la respuesta.
A veces ni yo sé si seré capáz de salir del avismo en el que me encuentro atrapada.