Y llegaron entonces
Las llaves de la libertad.
La poesía,
Aunque marcada por la influencia comunista,
Hizo que pudiera decir
“abiertamente” lo que yo quisiera.
De una forma un poco extravagante
Para la época empecé a jugar
Con figuras y palabras
Poco comunes en literatura
Pero cotidianas
Y mis manos se volvieron ligeras,
Mi pluma se volvió mágica
Y me gané a pulso
El que me reconocieran como alguien pensante, distinto
Alguien que se sabe expresar
Y que comunica
Lo que piensan y sienten
Los que no se atreven a hacerlo.
Luego la poesía cambió,
Un proceso interno
De raciocinio inconsciente
Creó un personaje,
Con características físicas y psicológicas propias,
Todo lo inversamente aceptable
En cuanto a lo conocido
Igualmente,
Le adjudicó una musa inspiradora,
Cual Adán y Eva en el paraíso,
Personajes bíblicos
Que siempre he considerado metafóricos.
Y nació José Domingo,
Ese hombre romántico, dulce,
Libre de miedos sociales y enamorado
“descaradamente” del amor.
Nacieron así mis poemas de la adolescencia,
Mis “Nostalgias”,
Y le siguieron los “De Hoy”,
Los “H,… Inolvidables”,
En fin, los irreales.
Escritos por un hombre imaginario
A una mujer imaginaria,
Llenos hasta la saciedad de aquellas frases
Que mi formación académica y familiar
Me impedían decir abiertamente,
Por eso el seudónimo,
Y Masculino,
Para mostrar que el tigre
No es como lo pintan,
Por eso el sentimiento profundo
De aquellos versos
De los primeros años
Rebosantes de sentimiento y libertad,
Libres de ataduras.
Tomado de "H... Inolvidable (1997)
- Autor: José Domingo Dosquebradas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de febrero de 2020 a las 12:10
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: Juan Q, alicia perez hernandez
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.