Un día cualquiera te conocí,
Sin pensarlo, sin creerlo posible, me enamore de ti,
Ya te veía a lo lejos y mi corazón se agitaba,
Me gustaba verte caminar hasta cuándo ya te perdidas en medio de la multitud,
Un día sel destino se empeño en presentarnos,
Mis manos sudaban y mi corazón estallaba emocionado,
Pero el destino me jugó una mala pasada,
Tristemente te encontré casada,
Y me límite a seguir viéndote cada mañana,
Creciendo en mi el anhelo de tenerte entre mis brazos,
Con el tiempo te fuiste y por mucho no supe de ti,
Hasta que nuevamente el destino te puso frente a mi,
No sabía que hacer, no sabía que decir,
Solo te miraba y escuchaba tu voz,
Mi cuerpo no respondía,
Mi mente se puso en blanco,
Mi corazón se detuvo,
Mi alma se estremeció,
Pero todo volvió a la calma cuando te supe libre,
Pero fue una falsa ilusión,
Tu corazón estaba lastimado y no quería saber nada del amor,
Entonces me propuse a conquistarte para que creyeras nuevamente el amor,
Y así pasaron los días y poco a poco fui logrando aliviarte del dolor,
Desnudando tu alma y curando las heridas de tu corazón,
Al principio fue muy duro, cargabas mucho resentimiento y las penas ahondaban en tu corazón,
Pero con paciencia y acciones llenas de amor,
fui borrando las huellas que te habia dejado el desamor,
con cada beso con cada abrazo fue renaciendo en ti la ilusión,
Y hoy estoy aquí frente a ti
Y verte tan hermosa y enamorada,
Sé que eres dueña de cada latido de mi corazón,
De cada uno de mis pensamientos,
De toda mi ilusión,
Solo quiero estar a tu lado y que ese lugar en que te encuentres poder llamarlo hogar,
Cásate conmigo ya no aguanto más espera,
Quiero estar contigo hasta más allá de la eternidad,
Descansar en tu regazo y cada mañana a tu lado despertar,
Y seguir escribiendo nuestra historia,
Y que nunca jamás tenga un final.
- Autor: Pitbull (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de febrero de 2020 a las 14:43
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Tamrico, Yamila Valenzuela
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