Dulce compañía de mi infancia
En tus ojos existe amor profundo,
Elegiste un camino de distancias
Elegiste otros sueños y otro rumbo.
A medida que los años van pasando,
Sigues preguntando al cielo;
¡Si fue acertada tu salida!,
Sigues avanzando e intentando
De heredar a los tuyos la sabiduría.
Temes a la soledad inclemente,
Imploras que no se te acerque, ni te cambie,
Pues has nacido rodeada de mucha gente
Y necesitas nuevas voces incesantes.
Te angustia el no recibir abrazos,
Te entristece el silencio, te opaca la soledad
Y se acrecenté el tormento
Sientes tus manos cansada
Y no tienes fuerzas para avanzar
Y en ese grito desesperado
Es donde te quiero abrazar:
¡Que no se duerman tus sueños!
¡Que no se apague tu llama!
¡Que escuches nuestras voces silentes!
Que por ti, ruegan siempre,
Querida hermana.
- Autor: Tinguinaki (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de julio de 2010 a las 00:05
- Comentario del autor sobre el poema: LAS COSAS SIEMPRE SE DAN POR ALGUNA RASON
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 67
- Usuarios favoritos de este poema: ivan semilla
Comentarios2
Me gusto asi extrañamos a las hermanas. y las seguimos amando. besitos..
aunque no pediste calificar me gusto.
SE VE QUE ESTA HECHO CON LA RAZON Y EL CORAZON
VALE POR ESO, AMIGA
TE FELICITO
ABRAZO GRANDE
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