De qué sirve que te quieran en un mundo tan vacío.
Donde los problemas cobran vida y las soluciones
se hacen pocas. Muchas luchas pendientes que en
cualquier lista no cabrían. Nos movemos en emociones
para dejar cosas pendientes y comenzar con otras.
Si tu conformidad se hizo costumbre no debes ser juzgado.
Hay que pensar en quiénes han escritos las lecciones
de las cuales sigo aprendiendo; cerrando puertas que
abrir ni siquiera he intentado.
Qué es lo que hace vibrar a tanto talento frustrado, cuando
el asfalto se hace paisaje y los pasajes cuadrados. Gramática
y matemática se vende todo por separado. Si enseñarnos
fue la intención, capacitarnos fue el resultado.
Un escriba primerizo dando los primeros pasos (o versos)
en un campo semántico desconocido. Dónde estuvo la poesía
toda mi vida. En la atmósfera de mi pieza y de mi baño está lleno
de eso. Lo recomendaría, pero no se escucha, no se ve, ni tiene peso.
Qué sentido tiene mi arte cuando ha estado escondido tanto tiempo.
Sin siquiera vivirlo quise ordenarlo en mi baúl de recuerdos.
Dónde estuvo la poesía en todos estos años. En un cuaderno
que por suerte del mal orden no había extraviado.
Qué simple es la vida cuando el camino se disfruta. Una inversión eterna
para que la vejez nos escupa en la cara: así nos educan.
Para juzgar a quienes trazan líneas circulares en un mundo que es cuadrado.
- Autor: Lenuah ( Offline)
- Publicado: 7 de febrero de 2020 a las 20:18
- Comentario del autor sobre el poema: Tras la catarsis social colectiva, hay revoluciones espirituales individuales en todos los integrantes de la comunidad en cuestión. ¿Qué viene ahora?, me pregunto. Un paréntesis de expectativas. No hay ni promesas hechas, ni promesas cumplidas. No hay nada. El arte es lo que nos queda y de eso no nos pueden despojar.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 25
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