Palabra muda
que espera otra palabra
y que no llega.
Habla el silencio,
musita unos sonidos
incomprensibles.
Pero es posible
que puedas entenderlos
con atención.
Un día tuve
la voz, en los oídos,
de las sirenas.
Era muy niño,
soñaba todavía
con los cometas.
Recuerdo tanto
el llanto de las olas
y las resacas.
Hoy solo busco
la lluvia de los cielos
y su mensaje.
Porque los años
se pasan y no vuelven
y yo te busco.
Busco tus ojos,
el beso de tus labios,
y algo de ti.
Rafael Sánchez Ortega ©
09/02/20
- Autor: Pyck05 ( Offline)
- Publicado: 12 de marzo de 2020 a las 08:34
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 35
- Usuarios favoritos de este poema: Yamila Valenzuela, alicia perez hernandez
Comentarios1
Palabra muda que la mirada puede traducir, quizás en la lluvia o en una ola de mar, que se ve venir, o en ese torrente de caricias que el viento lleva hasta ti; palabra muda de un corazón que de nuevo, empezó a latir, la que hace que ese niño que habita en ti, despierte los sueños que solían dormir, es esa palabra extensa diciendo que está el amor en el frío de la noche o cuando sale el sol...
Lo volviste a hacer; me inspiraste.
Me encantó tu poema.
Apapacho querido Rafael.
Gracias Yamila, me alegro de que mis letras produzcan lo que dices.
Un abrazo.
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