Finalmente me encuentro en donde querías verme, mordiendo el polvo y decaído.
Me dirás que lo tenía merecido, pues no valoraba los amaneceres.
He peleado con todo el mundo, obteniendo como resultado una abominable actitud.
Queda apenas un rastro de lo que solía ser, del sol enviado un témpano de hielo.
Antes amaba la lluvia sobre el mar, ahora odio las nubes grises y la tempestad.
Una serpiente vino a convencerme, ofreciéndome de su veneno.
Se antídoto para mi corazón, hazlo por los buenos tiempos, por nuestro viejo roto amor.
Puedes ver cicatrices en mis ojos, pero al cerrarlos son los mismos que en ti confiaron.
Mi alma se encuentra oscurecida, dale vida con un poco de tus colores.
Eres tan luminosa como antes, en cambio los pasos me han vuelto un jilguero con la voz cansada.
Es por eso que no reconoces mi canto, el amor quizás murió, ten compasión.
- Autor: Fernando? ( Offline)
- Publicado: 21 de marzo de 2020 a las 01:03
- Categoría: Amor
- Lecturas: 30
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