Me habló de una ciudad Con tres religiones Me preguntaba cual tendría la verdad Si no serían tres confusiones Los no creyentes disfrutaban Siempre de tres fiestas Todos los alimentos desgustaban Y disfrutaban de las siestas Esa ciudad refugio de intelectuales De gente que pensaba por su cuenta De todas las orientaciones sexuales Rechazaba todo tipo de venta Allí compré libros de contrabando Porque aquí estaban prohibidos Había contra la libertad un horrible bando Y en esa ciudad estaban los perseguidos
- Autor: argantonio ( Offline)
- Publicado: 22 de marzo de 2020 a las 06:50
- Comentario del autor sobre el poema: El hombre que me habló de aquella ciudad era compañero en el servicio militar de la marina, vivía en Tánger que aunque no era de España los hijos de padres españoles estaban obligados a cumplir el servicio militar. Saludos a todos los amigos del Alma
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Miachael, Yamila Valenzuela
Comentarios4
Manuel Meneses Jiménez, tuve la suerte de viajar a Tánger con frecuencia y poder comprar libros que estaban prohibidos en España, los adquiría en una librería del Boulevard Pasteur, eran dos mundos separados por el estrecho de Gibraltar. Prefiero estos tiempos a pesar de las estrecheces que aquellos de la censura, saludos y gracias
Lualpri, en cuanto pude cogía el tren y me escapaba a Francia, para un español de entonces era respirar la libertad, yo era aficionado a la pintura y descubrir el Louvre con su tesoro artístico fue una experiencia inolvidable, alli me encontré con mi paisano Bartolomé Esteban Murillo, el niño mendigo, tan real como si el tiempo no hubiera pasado, y yo estaba alli solo, algo inenarrable. Llaman a París la ciudad de la luz y se lo merece. Saludos y ánimo
Yamila, lo más triste fue en una ciudad marroquí, había una Iglesia panteista única en aquel país, el guía local no aparecía , pregunté por qué y me dijeron que estaba en pris
Estaba en prisión por haber tomado una cerveza , fumado y comido durante el Ramadán. No es bueno ser creyente
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